miércoles, 5 de mayo de 2010

La Responsabilidad: ¿un peso o una necesidad moral?.

Para FREUD el psiquismo constituye un sistema con la capacidad de transmitir y transformar una energía determinada que él divide en tres instancias: el Ello, el Yo y el Superyo; cada una con una función particular.

Este sistema posee una organización interna que se va desarrollando en forma cronológica desde el nacimiento.

La función del aparato psíquico es, en última instancia, mantener la energía interna del organismo al nivel más bajo posible; y esta diferenciación es la que permite concebir las transformaciones de energía.

El Ello es el polo de las pulsiones de la personalidad y contiene los impulsos instintivos, inconscientes, en parte hereditarios e innatos, reprimidos y adquiridos. Es la reserva energética de la psique que entra en conflicto con el yo y elSuperyo, que constituyen diferenciaciones del Ello.

El yo depende del Ello y del Superyo y representa el mediador que se ocupa de la totalidad de la persona. Es el polo defensivo que pone en funcionamiento los mecanismos de defensa, cuando percibe una situación no placentera.

El Superyo es el juez o censor del yo, y sus funciones son la conciencia moral, la auto observación y la formación de los ideales; y es el heredero del complejo de Edipo, que se forma por la interiorización de las exigencias y prohibiciones de los padres.

Desde este encuadre teórico el Yo es el encargado de mantener el equilibrio psíquico, y actuará según sus posibilidades. De manera que el destino del hombre es el conflicto entre sus impulsos y el principio de realidad, origen de la neurosis.

Si una persona actúa solamente teniendo en cuenta los principios formales aprendidos, es probable que se vuelva neurótica, porque reprimirá sus deseos más genuinos obedeciendo a su ley moral y a pautas sociales; y si logra sublimar sus instintos, suenergía reprimida buscará una salida socialmente aceptable, como por ejemplo, el intelectualismo, la santidad, etc.

Desde el existencialismo, el hombre es un proyecto existencial. Es arrojado al mundo y tiene que elegir su destino cada momento de su existencia, porque la existencia precede a la esencia, de modo que se define según sean sus decisiones y sus actos; y cada decisión lo compromete para siempre.

La fortaleza yoica es necesaria para poder discriminar lo importante de lo superfluo, los valores relativos de los trascendentes, lo necesario de lo contingente.

La responsabilidad no significa sacrificarse por otro, quiere decir hacerse cargo de lo que corresponde y de los propios actos, buscando la forma de asumir las obligaciones con creatividad, para no privarnos de lo que deseamos.

Los demás no tienen que ser obstáculos para nuestro crecimiento, son personas que amamos y que nos hacen felices, dignas de recibir nuestra ayuda si la necesitan, circunstancias en que haremos lo que podemos.

Cuando asumimos la responsabilidad de los que no cumplen con la suya o que lo hacen a su manera, los hacemos sentir inútiles mientras nosotros nos sentimos superiores, desalentando sus iniciativas.

Cada uno tiene que cumplir su rol a su manera y los demás tienen que aceptarlo, porque cuando alguno no cumple su rol en un grupo aparecen los conflictos.

Fuente: “Diccionario de Psicoanálisis” de Laplanche y Pontalís, 1968;
“El Existencialismo es un Humanismo”, Jean Paul Sartre, Ed. Huascar, 1972

2 comentarios:

Fran Gil dijo...

Hola!

La verdad es que yo hasta ahora, no recordaba el tema del Yo, Superyo y el Ello.

Lo que pasa es que yo no veo al Superyo como el juez del Yo, la manera en la que yo me imagino esto es; siendo el Yo juez total, que escucha las dos tendencias, el Ello y el Superyo. El Yo siempre podrá elegir, y el criterio que ha de seguir es el que le dicta su responsabilidad. Desde mi punto de vista el tema iria así.
Siendo el equilibrio que nosotros elijamos en esta balanza el que nos guie en el futuro. Puede haber mas tentaciones o puede haber mas autocontrol, decantándolo todo hacia un lado u hacia otro.

Personas en las que predomina el Ello, decimos que son irresponsables, se guian por impulsos y comodidades inmediatas.

Personas en las que predomina el Superyo, gente responsable, trabajadora, que cumple sus obligaciones.

He ahí los dos casos. Quizás pensemos que lo ideal es que la balanza esté en un peso neutro. En equilibrio entre ambos sin que haya más de uno que de otro, pero yo creo que la balanza debería decantarse hacia el lado del Superyo (aunque solo sea un poco) porque, si cumplimos nuestras obligaciones, digamos que llevamos a cabo una mejor organizacion en nuestra vida, que despues nos dejará momentos u oportunidades mejores para satisfacer el Ello.
Un claro ejemplo de lo que me refiero; el alumno que se organiza y aprueba sus asignaturas en junio. Digamos que ha tenido que estudiar bastante si, y ha sido una prevalecencia del Superyo frente al Ello, pero vamos que tampoco se ha muerto ni ha dejado de tener vida social ni de ver la luz del sol. Lo que ha conseguido es librarse de todo al fin por aplicar un poco mas de Superyo en la balanza que de Ello. Mientras que si se hubiese organizado peor (tuviese más Ello en la balanza) quizás le hubiese quedado una para septiembre, lo que reduciria sus posibilidades de satisfacer sus impulsos. Es curioso, como invertir en el Ello, puede llegar a ser contraproducente para satisfacer el Ello mismo!

Yo soy una persona que defiende mucho el Ello y el dejarse llevar por los impulsos y demás, pero, conforme pasa el tiempo, me doy cuenta de lo realmente dependientes del Superyo que somos, y de lo afortunados que somos de tener una responsabilidad capaz de criticar bien nuestras decisiones, pues siempre tenemos el incesante Ello llamándonos a dejarnos llevar, esos impulsos que nos dan en todo momento con todo tipo de cosas; ¿deberia meter los dedos en el ventilador, o salir de la habitacion ahora mismo? ¿Y si le echo un vaso de agua por encima a mi hermana?

Creo yo que si tuviesemos mas Ello que Superyo, no saldríamos bien parados en la mayoría de las situaciones. No hay por ello que eliminarlo por completo, sino repartirse de manera que tengamos 35% de Ello y 65% de Superyo.

Aunque claro, a veces también mantengo que tenemos que dejar libre nuestro Ello, para que se desahogue un rato, es como las terápias que se le hacen a la gente neurótica que tiene un superyo de caballo, éstas terapias que consisten en romper platos, disparar armas de fuego y cosas así.

Otra cosa que me es muy divertida es aquello de gente que cuando es irresponsable se desalenta ante los demás, quizás no es que sea solo que se desanimen, sino que los demás se animan más, por ejemplo, yo cuando me siento culpable por no haber estudiado suficiente, siempre siempre voy a hablar con alguien que yo se que lo lleva peor que yo, para sentirme mejor! si me voy a hablar con el mejor de la clase me deprimo seguro y me siento mas culpable. No solo deprimimos al irresponsable, sino que nos sentimos mejor si somos mas responsables jaja.

Un claro ejemplo soy yo ahora mismo, que debería estar estudiando pero me dedico a escribir aquí, solo que como es una actividad educativa me lo perdono y no me siento tan mal! jaja

Un saludo!

(PD: Fran Gil, por si acaso)

Juan Manuel Amador dijo...

Utilizar el yo, superyo y ello para hacernos una idea del funcionamiento de nuestra mente me parece una manera un poco simple, solo hay k fijarse por ejemplo en el funcionamiento de la memoria... Pero bueno tiene muchos aciertos, por ejemplo doy FE que los sueños son una vía de comunicación entre el insconciente y le consciente, de echo cada vez que algún amigo me cuenta un sueño, me hago una idea (bastante general eso si) de los sentimientos de esa persona, deseos, miedos...

Yo creo que si se pudiese responder con seguridad la pregunta "EL hombre, ¿Sociable por naturaleza?" se podría responder el titulo con total facilidad. Si somos seres sociables por naturaleza, la responsabilidad es una necesidad, porque la responsabilidad es siempre hacia otras personas, y en menor medida, hacia nosotros mismos. Ademas el hecho de pertenecer a un grupo ya es una responsabilidad por y para el grupo, y como yo apoyo la idea de que el ser humano tiene que sentirse parte de algo ^^, pues me decanto por la idea de que la responsabilidad es una necesidad moral, pero siempre desde la virtud, es decir "no nos vallamos a pasar de responsabilidades", porque seguro que habrá responsabilidades que no queramos tener, aunque esto ya depende del individuo.

Respecto al tema que planeta Fran:

Estoy de acuerdo contigo en que el superyo tiene que estar por encima del ello, pero si no me he saltado nada creo que se te ha olvidado especificar que eso es solo por la sociedad en la que vivimos.

Suponiendo que un mono tuviera también una mente que se rija como la nuestra, pues el mono seria al revés ¿no? 65 % ello y 35 % superyo.

Aun así no tengo muy claro ese porcentaje (es decir que el superyo este por encima del ello).
Me suele gustar poner el ejemplo del odio. Venga, yo vengo y te digo EL ODIO ES BUENO, seguramente lo mas bonito que me podrían hacer es echarme una mirada despectiva. Sin embargo, que seria el ser humano sin el odio? pues unos pelees, unos felpudos con huesos que van felices por ahí, no habría ningún tipo de justicia, porque igual que los conflictos de generan por odio (sigo poniendo ejemplos mas y mas concretos) lo que nos hace crear paz y separar a los que quieren pelear es una especie de "odio" a los conflictos ¿no?.

Adonde quiero llegar con este rollo es que los sentimientos hasta los mas "tabú", son muy necesarios y hay que tener mucho cuidadito con encerrarlos. Controlar los sentimientos es un arte que se aprende con el tiempo, unos lo hacen mejor, otros peor.
Ademas generalizar es la mayoría de las veces un gran error cuando tratamos con el ser humano. En biología te enseñan que el éxito del ser humano, ademas de ser un animal (bueno, esto de que seamos animales lo digo yo, eso si, no me refiero a "animal" en el sentido despectivo, sino a que no somos "na del otro mundo") bueno eso, que el éxito del ser humano sobre digamos, otras formas de vida, ademas de nuestra inteligencia y adaptación, es nuestra distinción entre los individuos (que también hace que tengamos una mayor adaptabilidad) es decir, ahora llega un cacho virus que nos mata fácilmente a todos y no hay cura. No problem, naturaleza al rescate, somos tantisimos y somos todos diferentes, alguno va a sobrevivir, y volver a dejar nuestra especie donde estaba.

Claro, todo tiene su parte buena y su parte mala, lo bueno es que nuestra especie es una maquina de supervivencia difícilmente vista antes.... lo malo es que hacer lago que nos guste (o disguste) a todos todos es bastante complicadillo. Y bueno solo hay que darse un paseito, politica, moral, ética...jeje anda que no nos gusta na pelearnos aver quien tiene la razón, y bueno aquí Ortega vendría y nos diría un par de palabritas...